"Lo tenemos que hacer, no nos queda alternativa, la policía no mujer al alcance". Así se expresa Toni Solana, uno de los promotores de las patrullas ciudadanas que se están organizando en Mataró por, según explican, hacer frente a los problemas de inseguridad que sufre la ciudad. Ante el repunte de los delitos en Mataró, vinculado en parte al rebrote de las ocupaciones, y de la carencia de efectivos policiales (la Generalitat destina más Mozos en Mataró de manera temporal pero el consistorio lo ve insuficiente), un grupo de vecinos se está coordinando para establecer grupos de vigilancia por turnos a cada uno de los barrios de la capital del Maresme. El objetivo, afirman, es patrullar las calles para enganchar in fraganti ladras y autores otros delitos para poder avisar la policía o, si es necesario, retenerlos hasta que lleguen los agentes. La iniciativa, que se está organizando a través del grupo de Facebook Patrulla Vecinal Mataró, se enfrenta el rechazo del Ayuntamiento. "Ni nosotros ni ningún municipio puede apoyar a una iniciativa como esta", afirman fuentes municipales.
Solana defiende que se trata de un "movimiento 100% pacífico" y que tienen muy claro que hay "líneas rojas muy finas que no podemos sobrepasar". La seguridad ciudadana es competencia del Estado y los ciudadanos a título individual o colectivo no tienen la potestad de encargarse. Aún así, los promotores de las patrullas recuerdan que la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LECRIM) permite a los ciudadanos retener una persona que esté intentando cometer un delito. De hecho en Mataró en los últimos días se han vivido dos casos de este tipo, con peatones evitando la fuga de dos presuntos ladrones. "Las patrullas son legales, cualquier personapuede retener otra en flagrante delito hasta que llegue la policía", relata Sólana.
Ayuntamiento y Policía Local, en contra
El Ayuntamiento y la Policía Local de Mataró se han mostrado disconformes con esta iniciativa. Solana explica se reunió el pasado jueves con el Sub Inspector de la Policía Local de Mataró, y que este le trasladó que el cuerpo no comparte la creación de patrullas ciudadanas. Perefeixen, según Solana, que los vecinos lleven a cabo otras iniciativas como por ejemplo denunciar en las redes sociales, llamar cuando se sea testigo de un delito para alertar la gente del entorno, y avisar la policía lo más rápido posible.
Desde el Ayuntamiento de Mataró también han dejado claro que no dan ningún apoyo a la iniciativa. Fuentes municipales señalan que "no podemos estar de acuerdo de ninguna forma con quehaya una organización de patrullas ciudadanas". Constatan que es una iniciativa llena de riesgos y que la seguridad ciudadana no es competencia de los vecinos. El alcalde, David Boto, manifestó el pasado miércoles, después de la junta local de seguridad celebrada con el consejero de Interior Miquel Buch, que entiende las reivindicaciones ciudadanas en materia de segurat y que está "al lado" de los mataronins en este ámbito. Pero esto no implica que desde el consistorio se apoye a iniciativas como las patrullas vecinales.
Un vecino reteniendo un presunto ladrón, el pasado martes
"Entendemos la postura del Ayuntamiento y de la Policía Local, pero nosotros seguiremos adelante", responde Solana. El objetivo es organizar patrullas a cada uno de los barrios de la ciudad, en tres turnos (mañana, tarde y noche) los siete días de la semana, con una cabeza por cada zona y coordinadores a nivel de todo el municipio. "Queremos garantizar que la gente pueda pasear tranquilamente, que los abuelos y abuelas vayan a hacer la compra con seguridad, que todo el mundo vuelva a casa sin el miedo que los hayan entrado al piso", apunta Solana. El plan que proponen requiere de muchos efectivos. "Pero somos mucha gente dispuesta, esto seguro", añade. Solana constata que pedirán "un certificado de antecedentes penales" a todas las personas que quieran adherirse a las patrullas, y que también rechazarán todas aquellas que muestren conductas violentas. "Grabaremos en vídeo todas nuestras acciones, también para evitar denuncias falsas", constata.
Otros casos de patrullas ciudadanas
El fenómeno de las patrullas ciudadanas se ha reproducido en varias zonas del Estado. El verano pasado, por ejemplo, fue especialmente notorio en Barcelona, dondehabía varios grupos organizados contra los carteristas del metro. En el Maresme se han vivido casos como los de la urbanización de Can Massuet del Faro en Dosrius, donde los residentes se organizaron contra la oleada de robos que sufrían. En el caso de Mataró ha habido varias tentativas de organizar en el pasado, pero nunca han llegado a buen puerto.
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